Ivy Cullen

por **Ivy Victory Masen Cullen** Sáb Ago 16, 2008 9:13 pm

Nombre Completo: Ivy Victory Masen Cullen
Fecha de Nacimiento: 3 de Octubre de 1902
Fecha de Transformación en Vampiro: 1918
Originaria de: Chicago Illinois
Edad: 106 años
Descripción Física: Ella tiene el cabello entre lacio y ondulado del color del oro viejo, facciones angulosas, ojos dorados/negros y tez de alabastro.
Descripción Psicológica: Cambiante. Depende de su ánimo aunque suele ser un tanto reservada en cuestión a su pasado. Cuando está de humor, se va de juerga con Alice y consigue hacer que Rosalie se distraiga un poco.
Talentos Especiales: Hacer que todas las personas hagan lo que ella ordena, lo quieran o no. También puede levantar barreras contra los poderes de los demás (en especial los de su hermano Ed) y cuando está muy enojada puede hacer que el agua hierva, el fuego se extienda o el viento se alce.
Hobbies: Tocar el violín, escribir, leer, cantar.
Historia Personal: Ivy nació como humana un año después que su hermano Edward. Creció con él durante toda su infancia pero a los catorce años decidió recorrer mundo y utilizando sus armas de persuasión (Ya formidables desde antes de ser vampira XD) y el pretexto de la búsqueda de un esposo, consiguió convencer a sus padres de que la dejaran marcharse. Así dejó una familia próspera y a su hermano, dedicándose por un año a viajar y conocer todo lo que podía conocerse, formándose una posición en la sociedad. Todo marchaba a las mil maravillas hasta que Ivy conoció a un hombre. Un vampiro. Cautivada por su misteriosa presencia, Ivy comenzó a tratarlo, convenciéndose que había algo diferente en aquel hombre, algo que ella no había sentido nunca. Joven e inexperta se zambulló en la personalidad del desconocido quien parecía tener extrañas y fascinantes intenciones. El vampiro nunca le reveló voluntariamente a la chica lo que él era, pero ella lo descubrió por sí misma al encontrarlo una noche con el cádaver de una doncella en sus brazos. Ivy advirtió la sangre, espantosamente abundante y los colmillos del hombre y comprendió la verdad. El vampiro se dispuso a matarla más Ivy le rogó la dejara vivir. Por alguna extraña razón, el vampiro aceptó. Ivy pudo vivir pero el afecto creciente que había desarrollado por el depredador se convirtió en horror y miedo. Pese a todo, ella no se alejó del vampiro, aunque la presencia de él le era ya sumamente inquietante. Se había desarrollado ahí una relación de dependencia de la que la joven no habría salido nunca de no ser porque llegó otra persona a la vida de Ivy. El que ella describiría después como: El amor de su vida. Un joven aristócrata con el que Ivy conseguiría olvidar al vampiro. Dos meses después de conocerse, en una decisión precipitada pero no impulsiva, se casaron. Parecía que Ivy lograría tener una vida normal, porque el condenado no volvió a acercarse a ella después de aquello. Ivy pensaba que todo había acabado. Sin embargo, estaba equivocada. Un año después de la boda, en el décimo sexto cumpleaños de la hermana de Edward, el vampiro volvió a aparecerse en su hogar y la transformó. En ese momento llegó el esposo de Ivy y el vampiro quiso asesinarlo, más, por segunda y última vez en su existencia, Ivy volvió a rogarle que respetara su vida y el vampiro la obedeció, aunque transformó también a su marido en vampiro. Luego, se marchó.
Los dos neófitos sufrieron la terrible transformación sin que nadie se enterara. Por razones de intimidad, habían establecido su casa en una zona muy apartada de la población, por lo que, al despertar, en un principio no tuvieron con qué alimentarse. El llanto de un bebé desgarró el aire e Ivy y su hombre estuvieron a punto de cometer el peor de los crímenes en nombre de la sed: Matar a su propio hijo. Más no perpetraron el asesinato, por un fuerte instinto de rechazo hacía la idea. Así fue como ambos lograron el auto control, tremendamente difícil. Viviendo cerca del bosque, muy pronto se les ocurrió la idea de cazar animales en lugar de humanos. Así, se fueron de la casa y desaparecieron, llevándose consigo a su bebé. Durante años vagaron por el mundo, perfeccionando su forma de vida, buscando conocimientos sobre su especie y dejando crecer a su hijo, quien muy pronto se convertiría en un apuesto muchacho. A la edad de diecisiete años y con pleno conocimiento de lo que estaba haciendo, el hijo de Ivy pidió a sus padres lo convirtieran y así se hizo. Siguieron vagando por la Tierra, en busca de vampiros "vegetarianos", aunque encontrando muy poca información. Los tres pensaban que no era posible que ellos fueran los únicos bebedores de sangre con ese tipo de vida e incluso llegaron a separarse, siempre en eterna búsqueda de sus congéneres. Ivy vivía obsesionada también con el recuerdo de su familia, a quien nunca más volvió a atreverse a visitar, porque no sabía con qué habría de encontrarse. En uno de sus errantes andares, Ivy se enteró de la existencia de los Volturi y dijo a su esposo y a su hijo que la esperaran en Rumania, lugar en el que por entonces residían. Sola, marchó a Volterra. Ahí fue cuando finalmente se enteró de la existencia de Carlisle, el vampiro vegetariano más famoso del que se tenía conocimiento. Extasiada de alegría, pese a que tuviera que usar sus poderes para escapar de los Volturi, Ivy quiso volver a Rumania. Pero, al llegar, le esperaba una realidad terrible: Una manada enorme e inusual de hombres lobo, conformada por alrededor de 50 licántropos había asesinado a su esposo y a su hijo. Ambos habían luchado ferozmente pero eran demasiados lupinos. Fueron descuartizados e incinerados e Ivy contempló la pira mientras su corazón se llenaba de cenizas. Abrumada por el dolor y por una rabia más allá de cualquier canon humano o vampirico, Ivy decidió vengarse. Armada con sus poderes persuasivos, potenciados por su condición, ella formó un grupo de vampiros, los suficientes para acabar con la banda de hombres lobo. Los rastreó con ayuda de la propia naturaleza y los mató a todos. Su venganza estaba consumada pero el dolor seguía allí, demoledor y lacerante. Ivy intentó acabar con su vida pero pronto comprendió que era inútil. Luego recordó lo que Aro le había mencionado, sobre el doctor Carlisle, y decidió partir en su busca, concluyendo que no le quedaba otra cosa que hacer. Intentando conservar sus esperanzas y no dejarse llevar por la depresión, ha llegado a Forks en busca de una nueva familia. XD

Pues este es mi historial. Sé que fue mucho tiempo el que paso desde que me presenté hasta que puse mi historial y que no he roleado nada Embarassed

pero es que había perdido mi contraseña. No me maten por eso XD. Gracias a Gabs ya tengo nueva y me uno a ustedes. Espero pasármela bien. Un beso- Ivy.

por **Tanya Denali** Sáb Ago 16, 2008 9:39 pm

No hay que agradecer, mágnifico historial por cierto.
Será un placer tenerte por aquí, ya Serena y Bella me han dado buenas recomendaciones tuyas.
Cualquier cosa ahi estamos Samm y yo.
un beso y diviertete.